Lo que nos decimos y pensamos de nosotros mismos determina en gran parte nuestra manera de sentir y de actuar, también determina el modo cómo nos percibimos y nos valoramos. Permanentemente mantenemos diálogos internos y rumiamos ideas sobre una u otra cosa de manera consciente o inconsciente, simplemente porque la mente es una "parlanchina" compulsiva. Estas conversaciones que el "yo" sostiene consigo mismo comienzan a muy temprana edad y van conformando con los años un "lenguaje interno", el cual puede ser beneficioso o dañino para nuestra vida, dependiendo de su contenido. Es imposible mantenernos en un silencio interior prolongado (a no ser que practiquemos la meditación y gocemos de sus beneficios). La mente siempre tendrá algo que decir, bueno o malo, constructivo o destructivo, enriquecedor o depresivo.
Al referirme al autoelogio, me refiero a una manera positiva y/o constructiva de hablar de ti mismo y felicitarte cuando crees haber hecho bien las cosas. NO hace falta, ni es necesario que lo hagas en voz alta y en público (eso sería sancionado y criticado) pero sí puedes hacerlo en voz baja.
Los autoelogios tales como: "¡Qué bien lo hice!", "¡Estuve genial!", "¡Me gusta mi manera de ser!", suelen ser tan importantes para nuestro autoestima, igual como los refuerzos externos o incluso más. La ventaja es que aquí no necesitas de intermediarios; serás tu propio motivador y podrás endulzarte los oídos a tí mismo y de este modo podrás contribuir con el crecimiento de tu estima personal.
Autoelogiarte permitirá el fortalecimiento de tu AUTOESTIMA y generará buenos hábitos de higiene mental y, lo más importante, ayudará a que la conducta autoelogiada se refuerce y continúe dándose en el futuro. También logrará mayor confianza y eficacia personal y, te brindará una gran seguridad al momento de hacer las cosas y/o de tomar alguna decisión
El autoelogio representa la máxima expresión de respeto, cariño y confianza personal; es, como diría Mafalda: "Para mi lo más importante soy yo". Muchas veces, de manera equivocada, el amor y afecto dirigido a uno mismo puede ser visto e interpretado como "egolatría", el cual indica que una persona se siente endiosada de si misma de manera egoísta e incapaz de amar a los demás, también es egocéntrica e incapaz de reconocer el punto de vista de otros. Sin embargo, la persona con un AUTOESTIMA SALUDABLE, es capaz de aceptarse a sí misma de manera honesta y genuina sin hacer alharaca ni alarde de sus aptitudes y logros personales. Es alguien que se elogia y se premia con palabras y pensamientos estimulantes de si mismo y también reconoce y valora las habilidades de los demás.
Por tanto, si hiciste algo bien, si lograste aprobar un examen difícil, si jugaste un buen partido de fútbol, voley o cualquier otro ELÓGIATE. Si terminaste de leer un libro con muchas páginas, si hiciste una buena labor en tu trabajo, si ayudaste a alguien desinteresadamente ELÓGIATE, FELICÍTATE Y REGÁLATE UN: "MUY BIEN HECHO", estimula tu "yo" con palabras agradables, ya que eres tú el único responsable de tu crecimiento personal y del logro de tu felicidad.
NO busques fuera lo que puedes encontrar dentro de tí.
Saúl Velásquez
Psicoterapeuta
999 029 969
No hay comentarios.:
Publicar un comentario