CONCIENCIA PLENA O MINDFULNESS, es una práctica de vida que consiste en prestar atención, momento a momento, a las sensacirumiación de pensamientos acerca del pasado o el futuro.
ones corporales percibidas por los cinco sentidos, a los pensamientos, las emociones y al ambiente circundante, todo ello caracterizado por "la aceptación", es decir, atención a pensamientos y emociones sin juzgarlos si son correctos o no, sin dejarse influir por ellos; sólo observarlos tal como son. De este modo el cerebro se enfoca únicamente en lo que es percibido en el MOMENTO, en lugar de proceder con la normal
En este contexto, la rumiación de pensamientos se refiere a la atención compulsiva que la mente da a los pensamientos que pasan por la mente, generando de esta manera influencias negativas sobre las emociones, y estás a su ves afectando a las sensaciones del cuerpo. En resumen: Los pensamientos compulsivos generan sentimientos o emociones negativas, y estas al mismo tiempo generan reacciones a nivel corporal (Problemas psicosomáticos)
Generalmente, la rumiación de pensamientos se enfoca básicamente en experiencias del pasado (recuerdos dolorosos), o en inquietudes del futuro, quitándonos de ese modo la oportunidad de vivir el PRESENTE (el regalo que te da la vida).
BENEFICIOS DE LA CONCIENCIA PLENA:
Por tanto, un modo efectivo para calmar la mente y la rumiación de pensamientos es la práctica de vivir en CONCIENCIA PLENA. Esta práctica no solo te ayuda a calmar la mente compulsiva, sino también te genera una serie de beneficios para tu salud tanto física, emocional y espiritual. Reduce el estrés, la ansiedad y la depresión. Mejora el estado de ánimo. Despierta la creatividad y la inteligencia. Genera una mejor relación a nivel personal e interpersonal. Acalla las voces del EGO (falso yo) y te genera una mejor identidad contigo mismo.
PRACTICAS COTIDIANAS PARA LOGRAR CONCIENCIA PLENA (C.P.) POR MEDIO DE LOS SENTIDOS: .
1. C.P. con el OIDO: Sal un día a caminar con la sencilla idea de escuchar los ruidos que te ofrece el lugar que habitas. Pon atención a los sonidos que te circundan: crujidos, voces distantes, el ruido que haces al pisar el suelo, un carro lejano, algún pájaro cantando, la brisa del viento, el sonido de tu respiración, de la lluvia, del crujir de la sojas que pisas; etc. Capta cuanto sonido venga a tus oídos, no los juzgues, no los describas, solo óyelos y disfruta un momento con ellos. Notarás lo placentero que es vivir esta experiencia.
2. C.P. con la VISTA: Mira con detalle las cosas que conviven contigo: un cartel publicitario, el movimiento de las ramas de un árbol, el color de la pared de tu casa, la sonrisa de alegría de las personas, el ajetreo natural del mundo diario. Fija tu atención a los detalles de tu mundo, al color del cielo, el brillo del sol, de la luna y las estrellas. Contempla como un niño con admiración el vuelo de las aves, el matiz de colores y formas de las flores y las hojas de las plantas. Capta con atención y conciencia plena cada cosa que tu vista contemple sin juzgarla, ni describirla, solo disfruta y siéntete pleno por la belleza de los colores y las formas que hay en tu vida.
3. C.P. con el GUSTO: Si te pones a comer algo, disfruta de tu comida y deleítate con el sabor, y la textura de lo que llevas
a la boca. Demórate un poco más en degustar los alimentos, saboréalos y déjalos en tu boca hasta que el paladar capte bien el sabor y las papilas gustativas los asimilen. Comer no es masticar y tragar. No comas solo por saciar tu apetito; paladea y estimula tu sensación del gusto, siéntelo y disfrútalo, percibe si es dulce, cálido, tibio, ácido, saladito, agrio; nota si es crujiente, blando, áspero, terso; etc. No necesitas un banquete, cualquier alimento por más sencillo que sea, puede convertirse en un manjar.
4. C.P. con el OLFATO: Oler no es de mala educación como muchos suponen, es otro modo de entrar en contacto con el mundo exterior y disfrutar de ello. Percibe la fragancia de un perfume, del jabón con el que te bañas, de las flores del jardín o del florero, de la brisa, de la comida. Huele la vida, la tierra mojada, el pasto recién cortado, lo limpio, lo sucio, el vapor de la sopa caliente. Hay olores en la vida que necesitan ser percibidos, necesitan ser notados; descubre de ellos y maravíllate de la fragancia que emanan y quieren decirte algo.
5. C.P. con el TACTO: Finalmente, la totalidad de tu cuerpo posee la facultad de sentir a través del tacto. la piel es el mayor de los sensores que poseemos. La piel te pondrá en contacto con un mundo adormecido por el uso de la ropa, por la vergüenza y los tabues. El sentido del tacto no solo te posibilita "tocar" a alguien, sino también ser "tocado" por otro ser humano. Abrazar al alguien y que te abracen transmite a la ves energía; siéntelo. Cuando acaricies a alguien concéntrate en lo que sientes, en el roce, en el contacto directo con la piel; siente la química que fluye en ese instante.
Camina descalzo, revuélcate en la hierba, juega con el barro o arcilla, abraza un árbol y llénate de su energía. Cuando te bañes no te seques inmediatamente, siente cómo en tu piel se deslizan las gotas de agua y cómo se evaporan. Sal a caminar bajo la lluvia sin paraguas y sin rumbo fijo y disfruta de las gotas correr por tu cabeza y tu rostro, siéntete mojado y con frío por un momento. También Disfruta de un día soleado, la sensación cálida de los rayos solares sobre la piel, del sudor de nuestro cuerpo.
El contacto físico es la mejor manera de comunicar afecto. Un apretón de manos, un abrazo, una caricia, no necesitan hablar para explicar algo; solo lo hace sentir.
El universo entero es sensual, todo entra por tus sentidos, todo explota frente a tí para que te apropies de ello por el canal que sea. Activa tus sentidos y desactiva tu mente.
Saúl Velásquez L.
Psicoterapeuta
999 029 969



















